viernes, 11 de junio de 2010

Microrrelato Z: Voy a abrir la Puerta.


Los golpes en la puerta y en las ventanas se han convertido ya en la música habitual. No tenemos más esperanza que aguardar a ir muriendo uno tras otro, quien resista más, que entierre al resto en el suelo del sótano que papá y yo levantamos cuando los cuerpos del abuelo y de Juan, mi hermano, empezaron a oler. Al principio nos estaban matando los propios muertos, qué locura, mamá jamás volvió del mercado y de Ruth, mi hermana, hace semanas que no sabemos nada. Entablillamos puertas y ventanas por dentro para evitar verles la cara. Sus ojos como idos, de mirada perdida y demente, y sus encías, hinchadas y sangrantes, que deforman sus bocas en una mueca de hambre irracional. Su piel putrefacta infectada por llagas purulentas. Sabemos que no podrán entrar, aunque son muchos, no tienen la fuerza necesaria para forzar ninguna entrada, se limitan a chocar, día tras noche, noche tras día, chocar sin descanso, sus gruñidos se clavan en mi mente, aún escucho los gritos de la gente cuando cierro los ojos.



Leer más.

0 comentarios:

  © Blogger templates Psi by Ourblogtemplates.com 2008

Back to TOP